jueves, 31 de diciembre de 2009

2009 y los amigos

A vísperas de recibir el 2008 me dedicaron una cumbia muy cómica, decía algo así como "♪ Yo no olvido al año viejo, porque me ha dejado cosas muy buenas ♫" En mi caso era la pura verdad, el 2007 me había dejado cosas muy buenas, como para bailar y no olvidar. El 2009 lo recibí en una fiesta y para mi sorpresa alguien puso a las 12 la misma canción y me di cuenta que aún celebraba lo que el 2007 me había traído. Seguía agradecido y bailando.

El 2009 me revolcó algunas veces. Me dejó confundido, aturdido y desolado otras tantas. El 2009 trajo cosas muy buenas, claro, pero no veo la hora que llegue el 2010. Es más, es tanta la emoción de voltear la página que es probable que me disfrace de tigre este 31 y no me quite el disfraz hasta el año nuevo chino, pues es el año del gran felino en el horóscopo chino.